Siguiendo el hilo conductor de su libro anterior, “Más coraje, menos represión”, en esta segunda parte, las autoras nuevamente se centraron en historias reales, cargadas de intensidad, sensibilidad y crudeza. Esta vez, no son ellas las protagonistas, sino que les dan lugar a las víctimas de abuso y violación, quienes a través de fuertes relatos, narran su sentir al haber transitado y sufrido esas experiencias.

“Que no quede en mí” es el grito de los que dijeron basta, como así también es la oportunidad de recorrer el tema desde la empatía y la teoría.

Fieles a su estilo, María Sol Biondi y Rosa María Curcho plantean esta obra como una herramienta que invita a reflexionar, decir, gritar y contar, esos hechos tan aberrantes capaces de marcar un antes y un después en cualquier ser humano.